Estimados Padres y Apoderados:
Junto con saludarlos, queremos comunicarnos con ustedes para abordar una problemática que se ha suscitado recientemente a través de distintos medios de comunicación (redes sociales, tv) en nuestro país y que, de una u otra forma, podrían eventualmente afectar emocionalmente a nuestros niños, niñas y jóvenes.
A través de las redes sociales y la televisión abierta se ha querido dar una señal de alerta indicando sitios web, cuentas de Facebook y programas de tv que están motivando a jóvenes y niños a cometer acciones que atentan contra su salud física y mental e incluso contra su vida, pero esta instancia, que ha nacido con una buena intención, se ha convertido también en el camino que ha conducido a un gran número de jóvenes y niños a indagar e involucrarse en ellas, sin ningún acompañamiento de un adulto responsable, provocando así que el camino de solución ofrecido sea al mismo tiempo, para muchos, el origen del problema.
Por lo anteriormente expresado y sin poner el énfasis en estas plataformas virtuales, queremos invitarlos a conversar esta situación con sus hijos e hijas en el hogar, para que adquieran la confianza y la seguridad necesarias para abordar satisfactoriamente este tipo de problemática.
Los Padres son el principal filtro y quienes deben oportunamente dar cuenta de situaciones que atenten contra la salud de sus hijos e hijas. Les sugerimos involucrarse en lo que sus hijos pueden estar viendo o haciendo, acercarse a ellos cada día y conversar, aunque sea un instante, acerca de lo ocurrido durante el día, interiorizarse en sus juegos o grupos de conversación, controlar el uso de sus redes sociales (Facebook, Twitter, WhatsApp, etc) y generar espacios de crecimiento para que ellos puedan aprender de sus errores y o bien, sentirse orgullosos de sus logros.
Del mismo modo, debemos estar atentos a las señales que nos puedan dar aviso de alguna situación fuera de lo común, como por ejemplo conductas depresivas, heridas en la piel sin causa alguna o causas inverosímiles, que busquen resguardo en ciertas horas de la noche para utilizar las redes sociales y evitar hacerlo públicamente, miedo o angustia excesiva.
Se les alienta a tomar esta y otras situaciones que se puedan dar en un futuro como oportunidades para abrir espacios de comunicación, reflexión y aprendizaje entre padres e hijos. Un niño feliz es aquel que puede contar con sus padres o tutores en todo momento.
Nosotros ya hemos iniciado acciones de intervención en los grupos curso y en forma individual para obtener información y dar tranquilidad y seguridad a nuestros estudiantes.
Por último, si tiene conocimiento de que algún niño, niña o adolescente está siendo instigado a participar de estas u otras acciones nocivas, debe darlo a conocer a las autoridades correspondientes.
Agradeciendo su tiempo y compromiso, me despido atentamente
Luis A. Campos Orellana
RECTOR
Colegio Colonial de Pirque